Extendiendo las alas y usando flores de bach

Mi hija mayor se va de viaje por unos meses.  Estoy muy contenta y emocionada… y nerviosa. 

Sé que la voy a extrañar, que va a regresar siendo una persona distinta.  Más madura, más segura, habiendo aprendido mucho, espero.  También sé que las rutinas en la casa cambiarán.  Que no sólo yo la voy a extrañar sino también sus hermanas.  Que habrá un hueco, y que todo esto está bien. 

Es en estos casos cuando me apoyo con las Flores de Bach. Walnut es una flor que nos ayuda con los cambios. Ayuda a fluir y a adaptarnos. Chicory ayuda a desprendernos como padres, dándoles espacio a los hijos para crecer. Holly da contención amorosa. 

Así, vamos tejiendo un tapete que poco a poco cubre nuestras necesidades, y nos da soporte emocional a cada uno de nosotros. Todas las experiencias nos ayudan a crecer. Cada experiencia la vives distinto dependiendo del lugar donde te toque. 

No es lo mismo la que se va, que la que se queda. No es lo mismo ser la mamá o ser la hermana.  Eso es de las cosas que me gusta de apoyarme con los sistemas florales: Puedes encontrar algo que ayude a cada uno a trabajar sus emociones desde su propio punto de vista.